<b>Noviembre 1998</b>
Noviembre 1998


¿Qué es leer?

Graciela GallelliNorma Salles

Creemos oportuno, antes de hablar de las finalidades de la lectura, transcribir algunas definiciones de los especialistas sobre ¿qué es leer?

;¿Qué es leer?

:“Leer es un proceso de interacción entre el lector y el texto, proceso mediante el cual el primero intenta satisfacer (obtener una información pertinente para) los objetivos que guían su lectura ... el significado del texto se construye por parte del lector. Esto no quiere decir que el texto en si no tenga sentido o significado ... Lo que intento explicar es que el significado que un escrito tiene para el lector no es una traducción o réplica del significado que el autor quiso imprimirle, sino una construcción que implica al texto, a los conocimientos previos del lector que lo aborda y a los objetivos con que se enfrenta a aquel. "(1)

"Leer es atribuir directamente un sentido al lenguaje, es interrogar al lenguaje escrito como tal, a partir de una expectativa real (necesidad-placer) en una verdadera situación de vida. "(2)

"Leer es rastrear información a partir de los interrogantes que nos planteamos al hacerlo. "(3)

En todas estas definiciones -así como en las de otros especialistas- está implícita la importancia del lector. Si bien el autor le atribuye un significado al texto que ha escrito, es el lector quien le dará el significado que considere mas acertado, según el contexto en el que se encuentre; el interés que lo acerca a la lectura de ese texto; sus saberes previos y su experiencia de vida.

Ahora deseamos compartir con usted atrás definiciones sobre el tema, dadas por lectores muy jóvenes, los chicos de 6° y 7° grado de la Escuela N° 7, del Distrito Escolar N° 6:

"Cuando leo estoy ahí. Sí, me concentro y estoy ahí. Cuando me desconcentro me voy a otro lado."

"Para mi leer es como una cadena. Primero, mi mamá me leyó a mí; ahora les leo a los mis chicos."

"Yo quiero leerle a mi primita como mi mamá me leía a mí."

"Es un gusto leer. El otro siente lo mismo que sentiste vos al leer."

"Anoche, mientras le leía, mi hermanita se durmió. Hoy, cuando se despertó, me dijo: ¿Cómo seguía el cuento?"

"Me gusta leerle a mi hermanita porque ella se queda pensando."

"Leer te relaja."

“A veces, lo que dice ese texto se parece a lo que dice otro. "

"Un día, un chico me dijo: - Vení que es muy lindo. Y yo me enganché porque la lectura te va interesando. Ese chico me enseñó qué es la Literatura. "

En síntesis, cada lector construye el significado del texto, a partir de la aplicación de diversas estrategias.

¿Qué es una estrategia?

Una estrategia es tanto un procedimiento, como una herramienta 0 un camino a seguir para el logro de un propósito prefijado. En el caso de la lectura, son muchas las estrategias que ponemos en juego, pero podríamos sintetizarlas en:

  • selección;

  • predicción;

  • inferencia;

  • confirmación;

  • autocorrección.

Vayamos a un ejemplo concreto, un texto cuyo título es "El diagnóstico y la terapéutica".

Todo lector, una vez seleccionado el texto, comienza a predecir, a partir del titulo. En este caso, podría tratarse de un texto de Biología, un planteo psicológico, una reflexión sobre la medicina actual... Como sabemos, hay tantas posibilidades como lectores. Pero si agregamos que su autor es Eduardo Galeano, se puede inferir que se trata de un texto de ficción, quizás narrativo con "deslices argumentativos" y, desde ya, comprometido, irónico y polémico; o tal vez, metafórico. La lectura definitiva del texto permitirá, al lector, confirmar o corregir las hipótesis.

El diagnostico y la terapéutica (frag.)

El amor es una enfermedad de las más jodidas y contagiosas. A los enfermos, cualquiera nos reconoce. Hondas ojeras delatan que jamás dormimos, despabilados noche tras noche por los abrazos, o por la ausencia de los abrazos ( ...) y sentimos una irresistible necesidad de decir estupideces.

El amor se puede provocar, dejando caer un puñadito de polvo de quereme ( ...) en el café en la sopa o el trago. Se puede provocar, pero no se puede impedir. No lo impide el agua bendita ( ...) tampoco el diente de ajo sirve para nada. (...) No hay decreto de gobierno que pueda con el, ni pócima capaz de evitarlo, aunque las vivanderas pregonen, en los mercados, infalibles brebajes con garantía y todo.

Eduardo Galeano

Si tratamos de analizar las situaciones de lectura cotidiana, se puede comprobar, con facilidad, que todo individuo alfabetizado realiza numerosos actos de lectura, en forma mecánica, desde el momento que se levanta hasta que llega a su primer destino:

  • lee la hora en el reloj;

  • lee los titulares, los chistes, el pronóstico del tiempo ... en el diario que acaba de levantar de la puerta de su casa;

  • lee el nombre de algún producto que consume en el desayuno; - lee las instrucciones de una tostadora nueva;

  • lee la síntesis que realizó para su charla en la Universidad;

  • lee el título de un libro que lleva para amenizar el viaje;

  • lee para revisar una lista de compras que escribió para la vuelta;

  • lee la boleta del gas que indefectiblemente debe pagar ese día;

  • lee ...

Se podrían sintetizar, entonces, los propósitos de la lectura en:

  • leer para obtener información;

  • leer para escribir;

  • leer para revisar lo que uno ha escrito;

  • leer para exponer (y argumentar);

  • leer para seguir instrucciones;

  • leer para disfrutar, para emocionarse, para recordar ...

Dada la importancia de la lectura en la vida cotidiana, es necesario reflexionar sobre el papel que cumple la escuela en la formación de lectores competentes, y no perder de vista la inclusión de propuestas y de textos que guarden estrecha relación con la realidad, es decir, textos de circulación social.

Y dentro de la escuela no podemos soslayar el rol de lectores que nosotros, como docentes, debemos "mostrar" a los alumnos. Para indagar sobre su "imagen como lector" le proponemos que responda lo siguiente:

  • ¿Me gusta leer?

  • ¿Qué es lo que más me gusta leer?

  • ¿Qué es lo que menos me agrada leer?

  • ¿Para qué leo? (para pasarla bien, para comunicarme, para distraerme, para informarme, para estudiar, para aprender ... )

  • ¿Cuándo leo?

  • ¿Con qué estados de ánimo?

  • ¿Leo sola/o? ¿Leo a otro/s? ¿Leo con otros?

  • ¿Qué siento cuando leo?

  • ¿Cómo leo? (Rápidamente, con tranquilidad, con interrupciones, con música de fondo ... )

  • Mientras leo, ¿consulto diccionarios u otros libros?

  • ¿Releo? ¿Qué textos?

Como lectoras (ávidas, casi "adictas") creemos conveniente cerrar este artículo, recordando las palabras de Umberto Eco:

" ... Pero con el lenguaje, los viejos se convirtieron en la memoria de la especie: se sentaban en la caverna, alrededor del fuego, y contaban lo que había sucedido (o se decía que había sucedido, esta es la función de los mitos) antes de que los jóvenes hubieran nacido (..) Hoy los libros son nuestros viejos. No nos da­mos cuenta, pero nuestra riqueza respecto del analfabeto (o del que, alfabeto, no lee) consiste en que el está viviendo y vivirá sólo su vida y nosotros hemos vivido muchísimas. Recordamos, junto a nuestros juegos de infancia, los de Proust; sufrimos por nuestro amor, pero también por el Plramo y Tisbe; asimilamos algo de la sabiduría de Solón; nos han estremecido ciertas noches de viento en Santa Elena y nos repetimos, junto con la fabula que nos ha contado la abuela, la que había contado Scheherezade. (..) El libro es un seguro de vida, una pequeña anticipación de inmortalidad. .. "(4)

Notas

(1) Sole, Isabel: Estrategias de lectura. Barcelona. Graó. 1993.

(2) Jolibert, Rosette y otros: formar niños lectores de textos. Chile. Hachette. 1992.

(3) Quintero, Nucha y otros: a la hora de leer y escribir textos. Bs. As. Aique. 1993.

(4) Eco, Umberto: por que los libros prolongan la vida. La Nación. 1991.

por Asociación Argentina de Lectura