<b>Octubre 2006</b>
Octubre 2006


Literatura infantil. Apuntes y reflexiones, de Sylvia Puentes de Oyenard

Graciela Rosa Gallelli

A partir de una amplia definición de la Literatura Infantil (pág. 5), la autora inicia el desarrollo de un estudio abarcativo sobre esta disciplina, si podemos llamarla así.

Si bien el libro lleva como subtítulo “Apuntes y reflexiones”, en su totalidad demuestra ser bastante más que unos meros apuntes ya que desarrolla en profundidad la mayoría de los temas que interesan, tanto a quien se dedica al estudio de la Literatura Infantil, como al docente o estudiante de la carrera - de Nivel Inicial o de Escuela Básica.

Una vez resueltas algunas cuestiones que siempre nos preocuparon , tales como si realmente existe una Literatura Infantil, quién la escribe, si es sólo aquella caratulada “para niños”, y otros aspectos que siempre ocuparon a quienes nos dedicamos al estudio de esta maravillosa disciplina, la autora cita varios autores a través de sus definiciones para concluir en el entronque de este tipo de literatura con la pedagogía, sin dejar de poner el acento en al valor estético de las obras que la integran.

La presentación de un cuadro aclarativo sobre ¿Qué comprende la Literatura Infantil?, nos lleva a un recorrido por el género lírico que concluye con una afirmación que tendría que guiar, tanto a docentes como a padres que ponen a los chicos en contacto con la poesía, cuando dice “Poesía es libertad./ No puede ni debe ser impuesta.” En el capítulo siguiente, la autora pasa al tratamiento del género narrativo, a partir de una clara diferenciación entre mito, leyenda y cuento, que aclara los tres conceptos tan lindantes en sus definiciones. La diferencia entre cuento popular y literario, la síntesis de la teoría de Vladimir Propp con respecto a los cuentos maravillosos y la definición precisa de este tipo de literatura – tomada de Todorov – completan la temática de esta primera parte, para dar lugar a la definición de “cuento literario” y a su relación estrecha con el cuento popular.

No podía faltar, en este amplio panorama de la Literatura Infantil, la presencia del Teatro. El teatro y el juego dramático, así como una amplia referencia al títere -varias definiciones – culminan en una afirmación que nos debe hacer reflexionar a quienes nos dedicamos a la tarea de educar:

“...La educación es una larga empresa en la cual los adultos tratan de llevar a los niños a su nivel y de cortar sus ala para obligarlos a caminar en vez de volar. Ojalá que el títere llegue a los niños como un aliado tan fuerte, para que los maestros aprendan a su vez que dos más dos no son necesariamente cuatro, que el sueño es más sabio que la experiencia y la ilusión más verdadera que la realidad.” (pág. 33).

Un panorama de la historia y la evolución de la Literatura Infantil – desde sus orígenes – nos lleva al descubrimiento de datos curiosos como la existencia de un primer librero infantil.

La recorrida por las páginas del libro, donde tanto aparecen las mujeres escritoras como los grandes recopiladores y creadores de cuentos para niños, desemboca en las funciones de la Literatura que nos ocupa; con acierto, la autora concluye en que la Literatura Infantil cumple funciones fundamentales que, insertas en el hecho pedagógico, interactúan entre ellas:

función estética;

función ética;

función social;

función didáctica;

función lúdica. (Conclusión: pág.59)

Los valores éticos y estéticos, así como la relación de esta literatura con Las políticas culturales, dan paso al tratamiento psicopedagógico del Cuento de hadas, en sus diferentes posturas, desde el merecido homenaje a Sosa Jesualdo hasta la indiscutible postura de Bruno Bettelheim.

Surge un tema muy poco tratado, hasta el momento, en el ámbito de la Literatura Infantil: Libros para niños con capacidades diferentes. Y nos encontramos con “Para la emoción” , un cuento cuyo protagonista es un niño con capacidades diferentes.

Libros en Braille, libros parlantes, táctiles, con grandes caracteres y mucho color, libros escritos en el lenguaje de los signos, para niños con retraso del habla y del lenguaje y con retraso en la lectura, aparecen tratados, con acierto, en este capítulo.

En los capítulos siguientes, la autora pone el acento en el análisis comparado de alguna obras ya clásicas de la Literatura Infantil – La pequeña vendedora de cerillas, de Andersen y David Copperfield, de Dickens.

El tratamiento de la ilustración, así como la presencia de la historieta dan paso a un detallada referencia a la Literatura Infantil Alemana.

En las últimas páginas, se realiza una aproximación al análisis literario de un cuento de la autora, al que siguen algunas técnicas de animación a la lectura y el tratamiento, en la literatura infantil, de un tema conflictivo tanto para niños como para los adultos, el tema de la muerte.

Este valioso ensayo, que tanto aporta al estudio y tratamiento de la Literatura Infantil y Juvenil, se cierra con una serie de datos de interés:

Asociaciones que trabajan por la infancia y los libros.

Revistas de Literatura Infantil.

Bibliografía general sugerida.

Esta rápida recorrida por las páginas de LITERATURA INFANTIL. Apuntes y reflexiones, nos demuestra el valor de la obra en el ámbito de la Literatura Infantil y Juvenil y confirma lo expresado en la contratapa del libro:

“Hacia 1944 fue Jesualdo Sosa el impulsor de estos temas. Desde la década del 70, es la autora de este ensayo, prestigiosa investigadora, la generadora de teoría de la Literatura Infantil en Uruguay y América. Sylvia Puentes de Oyenard ofrece en este libro las repuestas a muchos interrogantes de docentes y futuros educadores para una mejor comprensión del papel de la literatura en niños, niñas y jóvenes.”

por Asociación Argentina de Lectura